jueves, 3 de noviembre de 2011

Vivenciar los Órdenes del Amor

Vivenciar los Órdenes del Amor es una experiencia profunda, sanadora. Es traer el sentimiento puro del alma a la conciencia. Es conocer el modo en que las almas se relacionan entre si, se reconocen, se honran. Nos trae la posibilidad de manejarnos concientemente con estas condiciones del alma familiar que habilitan la circulación armoniosa del amor. Es el camino hacia la libertad, tomando la fuerza de la vida y el amor que nos llega a través de la familia.

viernes, 30 de septiembre de 2011

Conflictos intratables


Conflictos intratables

Los conflictos intratables tienen como base de sustento la conciencia tranquila y el deseo de aniquilación.
Cada grupo cree que tiene razón, que es mejor que el otro grupo, y que esta superioridad le da derechos y justifica cualquier acción con respecto a su enemigo.
Esta conciencia tranquila es la que cohesiona a los miembros de un grupo, es la que los une, les genera el sentimiento de pertenencia, los hace sentirse uno. La diferencia, lo distinto, los hace sentirse amenazados, de manera que surge el deseo de aniquilación del otro grupo para asegurar la propia supervivencia.
El deseo de aniquilación, y la eventual real aniquilación del enemigo, generan el triunfo del enemigo: al desaparecer la amenaza, el grupo vencedor pierde la razón de su cohesión, y se disuelve. Así, el vencido triunfa.
La única posibilidad de resolver un conflicto de esta naturaleza, es el reconocimiento de las diferencias, es decir, darle un lugar en el alma al otro, tal como el otro como es.
Cuando cada uno puede reconocer y tomar al otro como es, se abre la posibilidad de un intercambio, en el que se pueda dar algo y tomar algo, sin vivir el hecho de dar algo como una pérdida, un sacrificio, ó una derrota, sino, al contrario, con la satisfacción de la compensación en el dar y el recibir que unifica, en lugar de separar.
Cuando este intercambio se concreta, el enfrentamiento desaparece, é incluso sería posible que los grupos hasta entonces enfrentados, se unan y construyan en conjunto, en lugar de destruirse mutuamente.
Cuando surgen los grandes conflictos, siempre existe la tentación de la violencia para rechazar al oponente. Sin embargo, esa violencia, lejos de aportar a la solución, genera una escalada que, cada vez más, complejiza el conflicto, y hace que cada parte se sienta justificada a defenderse y agredir con más fuerza al otro.
De esta manera, es la escalada, más que el conflicto en sí mismo, lo que traba la solución. Y es la necesidad de mantener la conciencia tranquila, es decir, la defensa de los propios principios, la que sustenta esa escalada. Cada uno se siente bueno, y justificado en su agresión.
Cuando vamos más allá de la buena conciencia, y podemos mirar a los demás, viendo que todos estamos implicados, y en ese sentido somos iguales, que no hay personas mejores ó peores, el deseo de aniquilación desaparece. La sensación de estar en peligro, también.
Así, el encuentro puede darse entre los miembros de un grupo en base a otros parámetros, y con otros grupos en función de mirarlos como son, tomarlos como son, respetándose mutuamente, entendiendo que la diferencia no es mala en sí misma. Todo depende de cómo se mira, y cómo se valora. Si miramos las cosas como son, reconociendo lo que es, tal como es, entonces las razones y las justificaciones para el enfrentamiento desaparecen.

Marcelo Holtzman

martes, 10 de mayo de 2011

La vida desde la perspectiva de los Órdenes del Amor


martes, 26 de abril de 2011

La ley del número completo - Bert Hellinger

El individuo se siente entero y completo en un sistema si todas las personas que pertenecen a sus sistema, a su red familiar,tienen en su alma y en su corazón un lugar bueno y honroso,y si les concede toda su dignidad. Todos tienen que estar presentes. El que sólo se ocupa de su yo y de su restringida felicidad individual no se siente completo.

jueves, 21 de abril de 2011

Sabiduría - Bert Hellinger

El sabio asiente al mundo tal cual es
sin temor ni intenciones.
Se ha reconciliado con lo efímero
y no busca llegar más allá de aquello que perece con la muerte.
Su mirada abarca el todo porque está en sintonía,
y únicamente interviene donde la corriente de la vida lo exige.
Sabe distinguir: ¿Ésto va ó ésto no va?
Porque no tiene un propósito.
La sabiduría es fruto de una larga disciplina y del ejercicio,
pero quien la tiene, la tiene sin esfuerzo.
La sabiduría está siempre en camino,
y no llega a su meta por ir buscando.
Ella crece.

jueves, 24 de febrero de 2011

La huída - La plenitud - Bert Hellinger

La huída

Algunos pretenden conservar su inocencia negándose a participar. Prefieren cerrarse en vez de tomar. De esta manera tampoco están obligados a nada. Esta es la inocencia de los no-jugadores que no quieren ensuciarse las manos. Por éso, muchas veces se creen especiales ó mejores. Sus vidas, sin embargo, sólo funcionan al mínimo, y, en consecuencia, se sienten vacíos y descontentos.

Esta actitud se encuentra en muchas personas depresivas. En un primer lugar, se niegan a tomar al padre ó a la madre, ó a ambos. Más tarde transfieren esta actitud también a otras relaciones y a las cosas buenas de este mundo. Algunos justifican su negación de tomar con el reproche de que aquello que se les ofreció y se les dio no fue ni adecuado ni suficiente. Otros justifican el no tomar con las fallas del que da. El resultado, sin embargo, siempre es el mismo: los que así actúan se quedan inactivos y vacíos.

La plenitud

El efecto contrario podemos ver en aquellos que logran tomar a sus padres tal como son, tomando de ellos todo lo que les den. Este tomar es experimentado como un continuo aporte de energía y de felicidad. De esta manera se les capacita para tener también otras relaciones donde puedan tomar y dar mucho.

domingo, 20 de febrero de 2011

El destino . Bert Hellinger


Cuando una persona se inclina ante el destino,

entonces se vuelve tranquila y silenciosa,

humilde, pudiendo dejar atrás lo pasado

y mirando hacia adelante.

domingo, 23 de enero de 2011

Acerca del rencor

Uno de los trasfondos del rencor se resume en una simple frase: "¿Qué te habré hecho para estar tan enojado contigo?" El cambio empieza cuando la persona ve que hizo daño al otro, y cuando lo reconoce. Así, la pareja recibe el reconocimiento y queda reconciliada.
Bert Hellinger

miércoles, 12 de enero de 2011

El orden

El verdadero valor religioso está dado por la situación del que ama a Dios sin saber nada de religión, pero sirve al orden.

Marcelo Holtzman

lunes, 10 de enero de 2011

La felicidad da miedo

La felicidad se experimenta como peligrosa, porque nos convierte en solitarios. Lo mismo se aplica a la solución: se experimenta como peligrosa porque nos convierte en solitarios. Con el problema y con la desdicha, sin embargo, nos encontramos acompañados.
El problema y la desdicha van unidos a una sensación de inocencia y de felicidad. La solución y la felicidad, en cambio, van unidas a una sensación de traición y de culpa. Por éso, la solución únicamente es posible cuando la persona afronta esta culpa. Si bien no se trata de una culpa razonable, se experimenta como tal. Por este motivo, el paso del problema a la solución es tan difícil.


Bert Hellinger - Órdenes del amor