viernes, 20 de septiembre de 2013

Vidas consagradas - Entrevista Septiembre 2013 - Partes 1 y 2

http://youtu.be/m1oMZDhFRwc

http://www.youtube.com/watch?v=T-hGHwHVFAA

jueves, 21 de marzo de 2013

Más sobre "La benevolencia" - Bert Hellinger





















Conferencia. Buenos Aires, Julio 2006.
Segunda parte (*)

Benevolencia
Bert Hellinger:

Aquí se trata de las dimensiones del amor. Y me voy a seguir manteniendo en el círculo más pequeño.

¿Cuál es una linda manera de demostrar el amor?

Queriendo a los demás a través de la benevolencia. Siento benevolencia hacia el otro.

¿Qué ocurre cuando me preocupo por otro?

Cuando, por ejemplo, los padres se preocupan por un hijo. ¿Qué ocurre con el amor en mí y en el otro? Es como si algo se interpusiera. La preocupación está en el camino de la benevolencia. Y a veces hay un hijo que se comporta de una manera extraña y en un caso así los padres se preocupan. Y entonces pueden mirar más allá del hijo, a algo más grande. Una vez asistió a un curso una mujer que traía un bebé de cinco meses y se sentó a mi lado y tenía al bebé en sus brazos. La espalda del bebé estaba contra el estomago de la mamá. Entonces le dije a la mujer: mira más allá de tu hijo a la distancia. Muy lejos. Entonces lo hizo y el bebé respiró aliviado, me miró y me sonrió.

O sea este tipo de benevolencia mira más allá del otro. A algo más grande, y nosotros confiamos en que eso más grande va a tener un efecto bueno.

¿Y qué es ese algo más grande? Tengo una imagen sobre ello. Eso más grande es algo que a todo pone en movimiento y a todo mantiene en movimiento. Es algo espiritual y algo creativo.  Porque pone a todo en movimiento se dirige a todo tal como es. Lo contempla tal como es. Si nosotros nos unimos a ese movimiento, entonces dentro de ese movimiento aprenderemos a contemplar y dirigirnos a todo tal como es. Así para nosotros todo puede ser tal cual es. Y cada uno puede ser tal como es. Y entonces asentimos también a su destino tal como es. Y al sentido de su vida tal como es. Y entramos en la actitud de benevolencia. Queremos que al otro le vaya bien sin nosotros tener ninguna intención.

La benevolencia solamente es una actitud contemplativa que se dirige hacia alguien sin querer nada, en especial sin querer cambiar al otro, porque tal como es es como el espíritu quiere que sea. Entonces la preocupación cesa. Y a través de esa benevolencia, dado que está en sintonía con este movimiento del espíritu, el otro también encuentra más fácil sintonizarse con el movimiento del espíritu. Como se dirige a él con benevolencia, puede ser tal como el espíritu quiere que sea. Es decir, la benevolencia es a distancia y asiente al otro tal como es.

Bueno, a menudo tenemos la tentación de querer cambiar al otro. Nos gustaría que fuese diferente. ¿Y qué significa que sea diferente? Que para nosotros sea más cómodo. Menos desafío, queremos que sea igual a nosotros y lo estamos alejando de su movimiento más interno. Asiento al movimiento que es el más adecuado para él. ¿Entonces cuál es el efecto? En mi presencia él se siente seguro, seguro ante mí. Y entonces le es posible mostrar toda su belleza y todo lo que tiene de especial. Simplemente porque yo estoy de forma benevolente sin ninguna intención.

Lo podemos aplicar en muchas situaciones, sobre todo en la familia. Pero también en nuestra profesión. A veces camino por las calles y viene caminando un hombre y yo pienso ¿de dónde viene?. A lo mejor no es de aquí. Entonces practico la benevolencia. Asiento a él tal como es. Entonces viene hacia mí y empieza a hablar. Se siente completamente seguro conmigo porque sintió mi benevolencia.

Una mujer me contó que su hija tenía  problemas en la escuela con su maestro. Y muchas veces le llamaba para que viniera a su mesa y todas las veces le rompía el lápiz. Entonces ella le explicó a la hija algo acerca de la benevolencia y estaba practicando sentirla frente a ese maestro y la vez siguiente le devolvió el lápiz. Ese es el efecto de la benevolencia.

A veces entro en un negocio y entonces hay uno que le resulta fácil vender cualquier cosa. A la gente le gusta comprar. Y entonces pienso, ¿Cuál es su secreto? Siente la benevolencia. La gente lo percibe. Pero también hay otro secreto más. Este hombre ó esta mujer tienen una buena relación con su madre. Tienen eso. El que siente benevolencia y está relacionado de esta forma con su madre, se siente relacionado de la misma manera con muchas personas. La gente los ama. Aquel que tiene la sintonía con su madre tiene muchos amigos. En seguida se puede ver.

¿Cuál era mi tema? Ahora me fui por las ramas. Bueno, las dimensiones del amor. La benevolencia es una de las dimensiones del amor. A veces lo pienso, a veces miro las noticias de la televisión, los partidos de fútbol. El final de fútbol con Argentina también lo miré. Y los miré a todos con benevolencia.

Se escucha risa del público.

¿Y cuál es el resultado de mi benevolencia? No necesito decirlo, ¿no? Pero es así. Ok.

Ahora vuelvo a estar serio. Entonces muestran un criminal ó un corrupto ó algo así. Todo tipo de personas donde se incita a desearle algo malo a ellos, entonces voy practicando la benevolencia. ¿Y cómo lo hago? También cada uno de ellos, en lo que hace, es movido por el mismo espíritu y está al servicio de otra fuerza. Quizás a mí eso no me guste pero teniendo esa actitud interna llego a sentir la benevolencia. ¿Y qué ocurre cuando me dirijo a ellos con benevolencia? Repentinamente me doy cuenta que yo soy como él. Que yo estando en su situación podría ser como él. Que quizás inclusive en esa situación debería ser  como él. Y repentinamente en mi interior cambió algo. ¿Qué cambió? Me he vuelto más humano. A través de la benevolencia nos volvemos más humanos y a nadie se hace daño. ¿No es sencillo en realidad? Buen resultado sin efecto colateral.

Jesús en algún momento habló sobre la benevolencia y lamentablemente se da que muchas personas devotas parecen creer que tienen el derecho de querer hacer algo mal a alguien, hacia los así llamados pecadores, por ejemplo, ó el que sea. Entonces se imaginan que Dios creó un cielo y un infierno y se imaginan que Jesús cuando vuelva enviará a algunos al infierno por siempre y a los otros al cielo. Es una idea terrible, no tiene nada que ver con la benevolencia. Pero de este Jesús del que se dice que algún día vendrá a juzgar hay una palabra auténtica. Está claro que esta palabra proviene de Jesús. Porque no todas las palabras que se dice que dijo Jesús son auténticas. Ahí la ciencia moderna de la biblia puede notar la diferencia. Y ahora digo esta palabra. Dice: “sed misericordiosos como el padre en el cielo. Él permite que el sol brille sobre los buenos y los malos, en la misma medida, sin diferencias. Y permite que la lluvia caiga sobre los justos e injustos, en la misma medida, sin diferencias”. Tal como lo enseñaba Jesús. Y a veces pienso: sí, éso es un lindo concepto. Entonces practico esa benevolencia. Y si yo tomo en serio esta palabra para mí, mucho de lo que se dice que dijo Jesús para mí queda fuera. Ése es el Jesús que yo amo.

Y algo más. Quisiera decir algo más sobre los movimientos del espíritu. Muchos de nosotros quieren ayudar a otros con las mejores intenciones y también es cierto que ayudan a muchos. Pero si yo me sintonizo con el movimiento de este espíritu que dirige a todo tal como es, yo ya no quiero más ayudar, dejo que todo lo haga este movimiento del espíritu. Y ésto tiene un efecto curioso. Cuando me retiro de esta manera y confío en el movimiento del espíritu, este movimiento del espíritu me toma y la manera en que lo hace es que yo siento qué es lo que debo hacer, dónde tengo permiso para hacer y dónde debo retirarme completamente. Entonces hay una señal interna que me muestra claramente si estoy sintonizado con este movimiento del espíritu ó no. Si estoy sintonizado, estoy centrado sin intención, sin miedo y soy inamovible, no me muevo en ninguna dirección, pero si este movimiento me toma como para actuar, actúo de la misma manera completamente centrado y solamente a medida que este movimiento me sostiene. En cuanto tengo una intención, me intranquilizo, ó me pongo fervoroso, ó lo que es realmente terrible, me vuelvo curioso, pierdo esta benevolencia hacia el otro tal como es.

O sea, esa es otra dimensión del amor. Una dimensión amplia del amor. No es que esté separada de las demás dimensiones ó que esté por encima de ellas. Penetra a todos los demás movimientos del amor y les otorga una profundidad especial.  Otro secreto relacionado con estos movimientos del espíritu: estando en sintonía con ellos, estamos felices con todo lo que va ocurriendo.                
Y esto fue mi charla sobre las dimensiones del amor.




















domingo, 17 de marzo de 2013

La Benevolencia - Bert Hellinger

Jornada de formación. Ayudar a vivir en acción

Neuchâtel, 5 de junio 2005


La benevolencia, es una palabra muy bonita: quiero el bien del otro, quiero que esté bien. Y también: me mantengo a su lado como alguien que quiere su realización, su crecimiento.

Entro en resonancia con su alma de un modo que le permita realizarse.

¿Qué pasa cuando digo de un niño que es un hiperactivo? ¿Qué pasa cuando digo a alguien que es un drogodependiente, un depresivo, que tiene perturbaciones de la personalidad?

Imagine que alguien le diga algo así ¿Qué ocurre en lo profundo? El alma se marchita, se contrae, se excluye. Es terrible.

Se constata en este trabajo que por el sólo hecho de tener este pensamiento el efecto se despliega inmediatamente.

Experiencias recientes en medicina acaban de demostrarlo. A menudo una mujer desarrolla un cáncer de mama porque el médico piensa que tiene un cáncer de mama. Esto ha sido comprobado. No es más que por el efecto del pensamiento que esto se produce. Todos los diagnósticos tienen ese efecto. Los diagnósticos inducen el efecto diagnosticado.

A menudo me acusan por no dar un diagnóstico, cuando debería recibir una medalla por no hacerlo… porque yo sé el efecto nefasto del diagnóstico.

Si soy benevolente, y es una actitud en la que me ejerzo continuamente, con una mujer que viene a sentarse a mi lado, ó con un terapeuta que presenta un caso, me ejerzo a la benevolencia, en el sentido de abrirme, ampliarme. Y confío en su alma y confío en lo que le guía. A partir de ese momento me encuentro en otro campo. A partir de éso, el otro a mi lado, yo en mi benevolencia interna. Confío plenamente en la benevolencia. Entonces la persona cierra los ojos, algo se desarrolla en ly diez minutos más tarde dice “ya está, ya tengo todo lo que necesito” y se va.

Esto es debido a la presencia de la benevolencia.

Podemos ejercitarla en todo momento.

Tiene un efecto particular en nuestra alma, nos apacigua, nos da calma, sin hacer nada.

En cuanto siento en mí agitación o precipitación, ganas de ayudar a alguien, verifico y me pregunto donde me he alejado de la benevolencia. Y me tomo el tiempo para volver a la benevolencia. Lo que no siempre es fácil. A veces me cuesta un día entero, en función del acontecimiento que se produjo.

Y estar totalmente presente en la benevolencia sin hacer nada es un ejercicio maravilloso. Secretamente uno se alegra de lo que está ocurriendo, sin saber de donde nos viene.

Por que la fuerza fundamental, la que actúa detrás de todo, es benevolente.

Y en esa benevolencia entramos en contacto con algo más grande.

jueves, 7 de febrero de 2013

La fuerza de la vida

La vida no empieza, no se crea. La vida es. Cada nuevo ser no representa el nacimiento de una nueva vida, sino una expresión más, diferente, de la vida.
Ese nuevo ser es producto de la unión de dos células vivas, que al unirse toman una nueva forma. Lo mismo que una planta surge del despliegue de la vida que estaba latente en una semilla. Y a su vez, esas células, y esa semilla fueron generadas por otros seres vivos.
Así, la vida no empieza ni termina. Es una corriente que fluye y fluye, a través de cada ser vivo hacia los que vienen después. 
Los hijos reciben la vida por sus padres, y a su vez, se convierten en parte de la manifestación de esa corriente, permitiendo que la fuerza de la vida llegue después a sus hijos, por medio de sus propias células. Y quienes no tienen hijos, por su tarea, sus acciones.
Entonces los hijos recibimos la vida a través de nuestros padres. ¿Qué más necesitamos? Teóricamente, nada. Pero esperamos y pedimos mucho. Y nos quejamos, reprochamos, nos sentimos frustrados, cuestionamos. Y así nos hacemos débiles.
¿Qué significa que no necesitamos nada más?
SI pudiéramos mirar a nuestros padres y decirles: "me dieron la vida, y es todo lo que necesito", nuestra vida sería muy diferente. ¿Porqué? Porque ésa actitud implicaría tomar la vida en las condiciones en que la recibimos, sin cuestionamientos, sin reproches, sin enojos. Y sería tomar a nuestros padres tal como son, sin endiosarlos y sin demonizarlos. Tomarlos como son. Neutro. Y tomar, después de la vida, lo que ellos nos den. Tal como lo dan.
Entonces, cuando podemos tomar, respetar, honrar la vida, y tomar los que nuestros padres nos dan, tal como nos es dado, nos plantamos en el hoy, en lo que hay. Nos centramos, nos fortalecemos, y tenemos la posibilidad de hacer nuestro propio destino, con lo que nos dieron, con lo que tenemos, con lo que nos falta, libremente, tomando la fuerza de la vida que a través de los padres nos llega, y permitiendo que ella siga su flujo, a través de nosotros, hacia adelante.
Marcelo Holtzman.

viernes, 30 de noviembre de 2012



Violencia de género

Hellinger descubrió "Los Órdenes del Amor", cuando percibió las situaciones que generan conflictos y enfermedades en las familias y en las personas.
Esta trama de relaciones se da en el plano del alma de la familia, y de las personas que la integran. Se habla aquí de la red familiar, es decir de los miembros de todas las generaciones, que en ese nivel, siguen perteneciendo. Y que allí, se ven, se conocen, y saben de toda la historia familiar.
Así, pudo describir cuáles son las condiciones que permiten que el amor, que siempre está, pueda fluir con armonía entre los miembros del sistema familiar, y de cualquier organización humana.
Es decir que si se ordenan las relaciones entre las personas respetando esas condiciones, los conflictos, enfermedades, y todo tipo de dificultades se resuelven.
Uno de estos órdenes es  "El derecho al propio destino". Significa que nadie puede arrogarse el derecho de tomar el destino de otro en sus propias manos. Sin embargo, por amor y solidaridad hacia los miembros de la familia, habitualmente transgredimos esta pauta. 
Lo hacemos, porque amorosamente actuamos como si pudiéramos resolver, ó al menos aliviar, la situación de alguna ó varias personas que han vivido situaciones difíciles, dolorosas y que no pudieron resolverlas. 
En el caso de situaciones de violencia grave, lo que sucede es que la violencia queda instalada en la familia, ya que el asesino no logra asumir su responsabilidad, y por lo tanto no asume esa violencia como propia.
La persona que nunca es mirada es el perpetrador, ó los perpetradores. 
Pero el alma familiar, esa conciencia común a todos los integrantes de la familia no admite exclusiones. De manera que alguien, en generaciones posteriores, lo mira, en el plano del alma, para darle el lugar que el alma familiar exige. Esta mirada no es conciente, de manera que aquél que mira al perpetrador queda identificado con él, y en esa identificación toma su violencia, y la ejerce contra otros, ó se enferma para no manifestarla. La esquizofrenia, por ejemplo, puede ser una consecuencia de esa situación.
Aquél que ejerce la violencia no puede manejarla, controlarla, porque ni siquiera es suya. Pero al no ser conciente de su origen, tampoco puede resolverla. 
Entonces, al no encontrar una solución, la violencia sigue en el sistema familiar, y luego, ó al mismo tiempo, será tomada por otros familiares. 
La violencia no es un problema personal, psicológico ó emocional. Se trae de una situación ocurrida varias generaciones atrás, pertenece al sistema y es tomada por diferentes miembros. Esto explica la "repetición" que la psicología no puede resolver.
La solución pasa por mirar a la familia en su conjunto, como sistema, y desde allí poder ver de dónde proviene, y posibilitar que los descendientes ya no se identifiquen con la situación y con los que participaron en ella.
Por otra parte, la persona que sufre esa violencia también debe mirarse a sí misma: por algún motivo llegó a encontrarse en esa circunstancia, y conocer la causa le permitirá salir de ella. Es decir que tiene que salir de la posición de víctima que la deja impotente, porque queda sometida a la voluntad del agresor, y tomar una actitud activa, recuperar el poder sobre su propio destino.
El método de Constelaciones Familiares es una forma de encontrar la solución para los dos.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Vivenciar los Órdenes del Amor

Vivenciar los Órdenes del Amor es una experiencia profunda, sanadora. Es traer el sentimiento puro del alma a la conciencia. Es conocer el modo en que las almas se relacionan entre si, se reconocen, se honran. Nos trae la posibilidad de manejarnos concientemente con estas condiciones del alma familiar que habilitan la circulación armoniosa del amor. Es el camino hacia la libertad, tomando la fuerza de la vida y el amor que nos llega a través de la familia.

viernes, 30 de septiembre de 2011

Conflictos intratables


Conflictos intratables

Los conflictos intratables tienen como base de sustento la conciencia tranquila y el deseo de aniquilación.
Cada grupo cree que tiene razón, que es mejor que el otro grupo, y que esta superioridad le da derechos y justifica cualquier acción con respecto a su enemigo.
Esta conciencia tranquila es la que cohesiona a los miembros de un grupo, es la que los une, les genera el sentimiento de pertenencia, los hace sentirse uno. La diferencia, lo distinto, los hace sentirse amenazados, de manera que surge el deseo de aniquilación del otro grupo para asegurar la propia supervivencia.
El deseo de aniquilación, y la eventual real aniquilación del enemigo, generan el triunfo del enemigo: al desaparecer la amenaza, el grupo vencedor pierde la razón de su cohesión, y se disuelve. Así, el vencido triunfa.
La única posibilidad de resolver un conflicto de esta naturaleza, es el reconocimiento de las diferencias, es decir, darle un lugar en el alma al otro, tal como el otro como es.
Cuando cada uno puede reconocer y tomar al otro como es, se abre la posibilidad de un intercambio, en el que se pueda dar algo y tomar algo, sin vivir el hecho de dar algo como una pérdida, un sacrificio, ó una derrota, sino, al contrario, con la satisfacción de la compensación en el dar y el recibir que unifica, en lugar de separar.
Cuando este intercambio se concreta, el enfrentamiento desaparece, é incluso sería posible que los grupos hasta entonces enfrentados, se unan y construyan en conjunto, en lugar de destruirse mutuamente.
Cuando surgen los grandes conflictos, siempre existe la tentación de la violencia para rechazar al oponente. Sin embargo, esa violencia, lejos de aportar a la solución, genera una escalada que, cada vez más, complejiza el conflicto, y hace que cada parte se sienta justificada a defenderse y agredir con más fuerza al otro.
De esta manera, es la escalada, más que el conflicto en sí mismo, lo que traba la solución. Y es la necesidad de mantener la conciencia tranquila, es decir, la defensa de los propios principios, la que sustenta esa escalada. Cada uno se siente bueno, y justificado en su agresión.
Cuando vamos más allá de la buena conciencia, y podemos mirar a los demás, viendo que todos estamos implicados, y en ese sentido somos iguales, que no hay personas mejores ó peores, el deseo de aniquilación desaparece. La sensación de estar en peligro, también.
Así, el encuentro puede darse entre los miembros de un grupo en base a otros parámetros, y con otros grupos en función de mirarlos como son, tomarlos como son, respetándose mutuamente, entendiendo que la diferencia no es mala en sí misma. Todo depende de cómo se mira, y cómo se valora. Si miramos las cosas como son, reconociendo lo que es, tal como es, entonces las razones y las justificaciones para el enfrentamiento desaparecen.

Marcelo Holtzman

martes, 10 de mayo de 2011

La vida desde la perspectiva de los Órdenes del Amor


martes, 26 de abril de 2011

La ley del número completo - Bert Hellinger

El individuo se siente entero y completo en un sistema si todas las personas que pertenecen a sus sistema, a su red familiar,tienen en su alma y en su corazón un lugar bueno y honroso,y si les concede toda su dignidad. Todos tienen que estar presentes. El que sólo se ocupa de su yo y de su restringida felicidad individual no se siente completo.

jueves, 21 de abril de 2011

Sabiduría - Bert Hellinger

El sabio asiente al mundo tal cual es
sin temor ni intenciones.
Se ha reconciliado con lo efímero
y no busca llegar más allá de aquello que perece con la muerte.
Su mirada abarca el todo porque está en sintonía,
y únicamente interviene donde la corriente de la vida lo exige.
Sabe distinguir: ¿Ésto va ó ésto no va?
Porque no tiene un propósito.
La sabiduría es fruto de una larga disciplina y del ejercicio,
pero quien la tiene, la tiene sin esfuerzo.
La sabiduría está siempre en camino,
y no llega a su meta por ir buscando.
Ella crece.

jueves, 24 de febrero de 2011

La huída - La plenitud - Bert Hellinger

La huída

Algunos pretenden conservar su inocencia negándose a participar. Prefieren cerrarse en vez de tomar. De esta manera tampoco están obligados a nada. Esta es la inocencia de los no-jugadores que no quieren ensuciarse las manos. Por éso, muchas veces se creen especiales ó mejores. Sus vidas, sin embargo, sólo funcionan al mínimo, y, en consecuencia, se sienten vacíos y descontentos.

Esta actitud se encuentra en muchas personas depresivas. En un primer lugar, se niegan a tomar al padre ó a la madre, ó a ambos. Más tarde transfieren esta actitud también a otras relaciones y a las cosas buenas de este mundo. Algunos justifican su negación de tomar con el reproche de que aquello que se les ofreció y se les dio no fue ni adecuado ni suficiente. Otros justifican el no tomar con las fallas del que da. El resultado, sin embargo, siempre es el mismo: los que así actúan se quedan inactivos y vacíos.

La plenitud

El efecto contrario podemos ver en aquellos que logran tomar a sus padres tal como son, tomando de ellos todo lo que les den. Este tomar es experimentado como un continuo aporte de energía y de felicidad. De esta manera se les capacita para tener también otras relaciones donde puedan tomar y dar mucho.

domingo, 20 de febrero de 2011

El destino . Bert Hellinger


Cuando una persona se inclina ante el destino,

entonces se vuelve tranquila y silenciosa,

humilde, pudiendo dejar atrás lo pasado

y mirando hacia adelante.

domingo, 23 de enero de 2011

Acerca del rencor

Uno de los trasfondos del rencor se resume en una simple frase: "¿Qué te habré hecho para estar tan enojado contigo?" El cambio empieza cuando la persona ve que hizo daño al otro, y cuando lo reconoce. Así, la pareja recibe el reconocimiento y queda reconciliada.
Bert Hellinger

miércoles, 12 de enero de 2011

El orden

El verdadero valor religioso está dado por la situación del que ama a Dios sin saber nada de religión, pero sirve al orden.

Marcelo Holtzman

lunes, 10 de enero de 2011

La felicidad da miedo

La felicidad se experimenta como peligrosa, porque nos convierte en solitarios. Lo mismo se aplica a la solución: se experimenta como peligrosa porque nos convierte en solitarios. Con el problema y con la desdicha, sin embargo, nos encontramos acompañados.
El problema y la desdicha van unidos a una sensación de inocencia y de felicidad. La solución y la felicidad, en cambio, van unidas a una sensación de traición y de culpa. Por éso, la solución únicamente es posible cuando la persona afronta esta culpa. Si bien no se trata de una culpa razonable, se experimenta como tal. Por este motivo, el paso del problema a la solución es tan difícil.


Bert Hellinger - Órdenes del amor

domingo, 31 de octubre de 2010

Sin plan - Bert Hellinger

Sin plan

Sin un plan cualquier rumbo es posible.

“Sin plan” podemos someternos a otros planes sin ningún tipo de resistencia.

Por sobre todo podemos someternos a cualquier movimiento interno que nos lleve en su dirección.

Simplemente soltarnos.

“Sin plan” no es lo mismo que sin cabeza.

Se trata de un sometimiento conciente, un sometimiento que es entrega, que es “ir con”, un “ir con”, sin saber a dónde va el camino, ni que tan lejos va.

Por muy extraño que parezca, cuando no tenemos un plan es cuando nuestro recogimiento es más profundo.

Si bien nuestro recogimiento en nuestros viajes interiores siempre nos conduce a una meta, ¿de quién es la meta? ¿Todavía es nuestra meta?

De esta manera, sin plan, podemos encontrarnos con otros seres humanos.

Y ellos no necesitan tener miedo de nosotros, ya que sin plan no hay nada que deseemos de ellos, nada que se interponga en su movimiento.

Pero a veces, ese encuentro revela algo que demuestra ser bueno y necesario para ellos.

Y entonces actuamos y decimos ó hacemos algo que les haga bien.

¿Teníamos aquí un plan? ¿Ó, justamente, se reveló ante nosotros la posibilidad de ayudar porque estábamos interiormente sin plan, y entregados a la situación y conducidos por ella?

Sin plan también permanecemos en lo más profundo del amor. Él indica el camino a cada instante.

Sin plan es como emprendemos nuestros viajes interiores.

Seguimos sus movimientos, y el mismo movimiento es ya nuestro ejercicio.

De ahí que no podemos determinar una hora fija ni hacer un plan para nuestros viajes interiores.

De repente se apodera de nosotros el recogimiento irresistiblemente.

Sin plan, podemos ceder, sin saber hacia dónde nos lleva, hacia qué conocimiento, hacia qué actuación, hacia qué amor.

¿Qué ocurre entonces con nuestros planes? ¿Sirven para algo?

lunes, 25 de octubre de 2010

El amor a la madre y el amor al dinero - Bert Hellinger

Algunos quieren tener dinero sin respetar a la madre. El dinero tiene un alma y se da cuenta de éso. Hay dinero que quiere quedarse, y hay dinero que quiere irse. Y tiene que ver con éso: si lo respetamos como a nuestra madre.

El que desprecia el dinero desprecia a su madre. Muchos pobres son pobres porque desprecian a su madre. También el pobre debe amar el dinero como a su madre, entonces llega.

Bert Hellinger

Buenos Aires - Septiembre de 2007

lunes, 20 de septiembre de 2010

El amor en la pareja - Tres palabras mágicas

La felicidad total depende de:

Primero: Si: el hombre mira a la mujer tal como es y dice "si, te amo tal como sos, asiento a que seas como sos"; y ella le dice lo mismo al hombre "si, asiento a vos, así como sos, te amo".

Se puede agregar: el hombre mira a la familia de la mujer y le dice: "si, asiento a tu familia tal como es".

Entonces la mujer se siente aceptada junto con su familia, y se siente segura con el hombre tal como es. Y lo mismo hace la mujer con el hombre y su familia.

A veces hay algo que se opone al si, y es la diferenciación de que una es mejor que la otra. Muchos creen que su familia es la mejor. Éso se mueve en el campo de la conciencia. Algo que es diferente. Diferente es igual de bueno.

Éso comienza con el hombre y la mujer. Ellos son distintos, por éso algunos hombres piensan que los hombres son más importantes y mejores. Y algunas mujeres piensan lo mismo de las mujeres. Y el gran crecimiento interior consiste en reconocer que las dos cosas tienen el mismo valor a pesar de ser diferentes. Es decir que amamos lo diferente por encontrarnos con una persona que es diferente, y reconocer que ella como mujer es buena por ser diferente, y que para él se vuelve valiosa por ser diferente. Y a la inversa de la mujer al hombre.

Por ésto que es diferente nos enriquecemos. La diferencia nos desafía a desarrollarnos. Y el crecimiento interior se da cuando podemos incorporar como bueno algo que es diferente.

El hombre crece si a la familia de la mujer le reconoce el mismo valor que a la propia. Es decir que ambos deben crecer al reconocer que la familia del otro es igualmente valiosa, aunque sea diferente.
Ese si es un si grande, que va más allá del individuo, y que incluye a su familia. Que también diga si a lo que los destinos de esas familias significará para la relación que comienza.

Cada vez más lo que está afuera se va incorporando, y con éso nos volvemos amplios y grandes; y de esa manera el hombre puede ponerse contento a través de su mujer aunque sea diferente. Incluso porque es diferente.

Algunos esperan la pareja ideal, esperan mucho, y en eso van perdiendo la felicidad.

¿Qué es la felicidad para el hombre? La mujer es como él y así no necesita cambiar. Ó la mujer es igual a la madre, y así no necesita cambiar.

Para la mujer es lo mismo. Así no hay desafío, todo puede seguir igual: el hombre es como ella, ó como su madre.

Segundo: Por favor: una vez que se han dicho si, dicen "por favor", sin agregar nada.

Cuando decimos por favor, sólo por favor, ¿qué ocurre en el alma del otro? ¿qué ocurre con el amor? ¿cuál movimiento comienza?. Comienza un movimiento para regalar desde el corazón, y en el otro comienza un movimiento de tomar.

Tercero: Entonces el otro le dice “gracias”. Luego de pedir viene el “gracias”, y luego comienza por el principio: si, por favor, gracias. Y así una pareja se hace feliz.

“Yo te amo, y amo a aquello que nos guía a vos y a mí, aunque nos guíe en diferentes direcciones”. O sea que a pesar de ser guíados por caminos distintos, el amor permanece

miércoles, 18 de agosto de 2010

El amor ciego nos lleva a la enfermedad - Stephan Hausner

El amor ciego nos lleva a la enfermedad

Stephan Hausner

Buenos Aires - Agosto de 2001

  Entero, sano en su totalidad, solamente puede sentirse uno que ha tomado a todos a quienes pertenece; que puede mirar a cada uno a quien pertenece a los ojos, y puede decir “lo tomo de ti, también a ese precio, y me lo guardo como algo especial”. Y quien ha tomado de esta manera lo que pudo recibir, y quien está en sintonía con lo que ha recibido: con lo fácil y también con lo difícil, y quien también está en sintonía con aquello que no ha podido recibir, en realidad tiene todo lo que necesita.

Nadie puede pasar de largo de sus padres, y lo que sea que fuese el precio, solamente los puede tomar como son y con todo lo que les pertenece. Y a quien no le es demasiado alto el precio, puede apoyarse en sus padres, sabe que están a sus espaldas, y puede dejarse penetrar por su fuerza, quizás también aunque no los conozca.

viernes, 6 de agosto de 2010

Formación en los Órdenes del Amor

Aunque la formación incluye la técnica de Constelaciones Familiares y Organizacionales, la intención es que esta formación en los Órdenes del Amor sea un proceso de crecimiento y evolución personal.

Es por éso que está dirigida no sólo a quienes tengan interés en dirigir constelaciones, sino a a todos aquellos que deseen profundizar en esta mirada de las relaciones entre las personas desde el nivel del alma, tomando contacto con el amor que es la esencia de todo lo que es, y de todo lo que hay.

El amor, que es el sustento y la razón de nuestra existencia y de nuestras acciones.

Se desarrolla en los talleres. Hay que participar en dos jornadas de taller mensuales. Después del taller, un espacio para explicaciones y preguntas acerca de lo trabajado en el día.

Además, hay dos encuentros mensuales para profundizar lo conceptual: ¿qué son, como operan los Órdenes del Amor?, y aprendizaje de aspectos técnicos para el trabajo con constelaciones.
También para preguntas y comentarios que hayan surgido desde el encuentro anterior.

Incluye algunas constelaciones que hacen a la formación, también.

Los que quieran hacer constelaciones, a medida que avancen, van a participar como asistentes míos en los talleres, y más adelante, podrán constelar.

viernes, 9 de abril de 2010

LAS CONSTELACIONES FAMILIARES COMO FILOSOFÍA APLICADA - BERT HELLINGER

LAS CONSTELACIONES FAMILIARES COMO FILOSOFÍA APLICADA - BERT HELLINGER

Transcripción parcial de la conferencia pronunciada en el Seminario “Sanar y Soltar”

del 9-11 de Febrero 2004 en Garmisch Partenkirchen / Alemania. (está en estilo coloquial – grabado en vivo durante la conferencia)

Cuando observo cómo se han desarrollado las Constelaciones Familiares, desde el primer libro que editó Gunthard Weber,y cómo se extendió todo, no solo aquí, sino también en otros países, de una manera que a veces nos corta el aliento, percibo, cómo detrás de este movimiento, actúa una fuerza poderosa, algo bueno, que nos ha tomado – a mí y a Uds., a su servicio.

Por eso, lo que estamos haciendo, independientemente de aquello que imaginamos que estamos haciendo... bueno, lo que quiero decir es: este movimiento nos arrastra, irresistiblemente. Nadie lo puede detener. Esta fuerza es difícil de resistir…. Y aquellos, que desde su pequeña mente piensan que siempre tienen que dirigir todo, no lo entienden. Pero también ellos están al servicio de este gran movimiento, porque, esta es mi convicción y se corrobora cuando miramos las cosas como son, lo divino o la potencia primaria, esa fuerza que mueve al mundo, quiere el conflicto.
Solo nosotros anhelamos la eterna paz en un reino de ilusión, donde nos saciamos y nos quedamos inmóviles, estancados. No, lo creativo está siempre en movimiento contra las resistencias. Recién ante las resistencias lo viviente gana su pleno potencial.

Cuando me entero de cuántos variados talleres son ofrecidos en este seminario por tantos colegas de larga experiencia, pienso: maravilloso, cómo todo se ha desarrollado. Cada uno aporta al Todo algo muy especial. Sólo por esta plenitud, este caudal de diferencias, los muchos que colaboran con su experiencia personal y con sus enredos personales, como también con sus capacidades y sus limitaciones, las Constelaciones Familiares se están desarrollando con una riqueza extraordinaria. Ahora estoy pensando:”soy uno entre tantos, que también trabajo con esto”.

LAS CONSTELACIONES FAMILIARES COMO PSICOTERAPIA.

Ahora quiero decir algo sobre las Constelaciones Familiares desde mi experiencia. Cómo se han desarrollado y cómo sigue este movimiento. Al principio las Constelaciones Familiares eran una especie de psicoterapia. Las ofrecíamos en el marco de la psicoterapia para personas que estaban buscando psicoterapia. Muchas veces eran personas enfermas de cuerpo y alma. Las Constelaciones Familiares les ayudaban. Desde nuestra formación psicoterapéutica aportábamos nuestra actitud y ésto le dio un sello especial a las Constelaciones Familiares desde un comienzo.
¿Cuál era nuestra actitud? Se basaba en la suposición: aquí está un cliente que es un necesitado y allí está un terapeuta, que le puede ayudar. Este se preparó con diferentes métodos y ahora conoció las Constelaciones Familiares y las aplica con el concepto de la psicoterapia. No como terapia individual, sino con un enfoque de terapia familiar. Y nosotros, como terapeutas, hacíamos algo. Fuimos entrenados para hacer algo, intervenir según nuestros conocimientos.

Así configurábamos también las familias. Pedíamos al cliente que eligiera y configurara representantes, luego interveníamos según nos parecía oportuno de acuerdo a nuestras formaciones anteriores y según lo que aprendimos de Ordenes del Amor y los vínculos dentro del Sistema Familiar, con el propósito de encontrar una solución. Primero mirábamos el problema y después buscábamos una solución. Ésto fue de mucha bendición.

CAMINANDO CON EL ALMA

Luego se manifestó que los representantes tenían una función más importante de lo que suponíamos en un principio. Se pudo observar que los representantes estaban en un contacto muy inmediato con un campo más amplio y pudieron desde allí traer a la luz algo, que iba más allá de lo que habíamos descubierto como Órdenes del Amor. Los representantes pudieron hacerlo, siguiendo un impulso que los ponía en movimiento. De pronto estábamos confrontados con situaciones nuevas y con movimientos nuevos. Estos movimientos muchas veces contradecían nuestros conceptos preconcebidos.

Algunos entonces sentían la necesidad de interrumpir tales movimientos, en vez de esperar y observar lo que se iba manifestando. Pasó cierto tiempo hasta que pude darme cuenta – estoy hablando de mí ahora – que si yo soporto la espera y me abro a lo que se muestra, llego a profundidades que superan de lejos cualquier psicoterapia. Estoy de pronto en contacto con fuerzas del destino ante los cuales me siento impotente.
De pronto vemos, por ejemplo, que alguien es atraído fuertemente hacia la muerte. ¿Qué hacemos entonces? Ó alguien se siente culpable de la muerte de otro. ¿Con qué método aprendido de la psicoterapia podemos intervenir aquí? ¿Ó estamos llegando a un límite en nuestros intentos de ayuda donde el “no hacer”, el ”soltar” se hace imperante?. Donde, recién cuando dejamos de actuar, comienza la auténtica ayuda.

Una nueva fuerza toma la conducción. Yo me entrego a esa fuerza, y de repente me doy cuenta si tengo que intervenir, hacer algo y qué es lo que tengo que hacer. Aún cuando en un principio parece absurdo. Pero yo voy con el movimiento, y entonces se muestra, se despliega algo, que de ninguna manera se podía prever.
Bueno, esto va más allá de la Terapia Familiar y más allá de toda terapia. Lo que comenzó con las Constelaciones Familiares se transforma en un Caminar con el Alma. ¿Cuál alma? No con la propia, no con la del cliente, ni con la del representante, sino con el alma que actúa en todos al mismo tiempo.

Cuando llegamos a una sintonía con aquella alma, sentimos paz. Nos hemos detenido frente a lo inconmensurable y este “inconmensurable” se nos acerca en el resultado.

martes, 6 de abril de 2010

LAS CONSTELACIONES FAMILIARES COMO FILOSOFÍA APLICADA - BERT HELLINGER

LAS CONSTELACIONES FAMILIARES COMO FILOSOFÍA APLICADA - BERT HELLINGER.

Transcripción parcial de la conferencia pronunciada en el Seminario “Sanar y Soltar”

del 9-11 de Febrero 2004 en Garmisch Partenkirchen / Alemania. (está en estilo coloquial – grabado en vivo durante la conferencia)

Cuando observo cómo se han desarrollado las Constelaciones Familiares, desde el primer libro que editó Gunthard Weber,y cómo se extendió todo, no solo aquí, sino también en otros países, de una manera que a veces nos corta el aliento, percibo, cómo detrás de este movimiento, actúa una fuerza poderosa, algo bueno, que nos ha tomado – a mí y a Uds., a su servicio.

Por eso, lo que estamos haciendo, independientemente de aquello que imaginamos que estamos haciendo... bueno, lo que quiero decir es: este movimiento nos arrastra, irresistiblemente. Nadie lo puede detener. Esta fuerza es difícil de resistir…. Y aquellos, que desde su pequeña mente piensan que siempre tienen que dirigir todo, no lo entienden. Pero también ellos están al servicio de este gran movimiento, porque, esta es mi convicción y se corrobora cuando miramos las cosas como son, lo divino o la potencia primaria, esa fuerza que mueve al mundo, quiere el conflicto.
Solo nosotros anhelamos la eterna paz en un reino de ilusión, donde nos saciamos y nos quedamos inmóviles, estancados. No, lo creativo está siempre en movimiento contra las resistencias. Recién ante las resistencias lo viviente gana su pleno potencial.

Cuando me entero de cuántos variados talleres son ofrecidos en este seminario por tantos colegas de larga experiencia, pienso: maravilloso, cómo todo se ha desarrollado. Cada uno aporta al Todo algo muy especial. Sólo por esta plenitud, este caudal de diferencias, los muchos que colaboran con su experiencia personal y con sus enredos personales, como también con sus capacidades y sus limitaciones, las Constelaciones Familiares se están desarrollando con una riqueza extraordinaria. Ahora estoy pensando:”soy uno entre tantos, que también trabajo con esto”.

LAS CONSTELACIONES FAMILIARES COMO PSICOTERAPIA.


Ahora quiero decir algo sobre las Constelaciones Familiares desde mi experiencia. Cómo se han desarrollado y cómo sigue este movimiento. Al principio las Constelaciones Familiares eran una especie de psicoterapia. Las ofrecíamos en el marco de la psicoterapia para personas que estaban buscando psicoterapia. Muchas veces eran personas enfermas de cuerpo y alma. Las Constelaciones Familiares les ayudaban. Desde nuestra formación psicoterapéutica aportábamos nuestra actitud y ésto le dio un sello especial a las Constelaciones Familiares desde un comienzo.
¿Cuál era nuestra actitud? Se basaba en la suposición: aquí está un cliente que es un necesitado y allí está un terapeuta, que le puede ayudar. Este se preparó con diferentes métodos y ahora conoció las Constelaciones Familiares y las aplica con el concepto de la psicoterapia. No como terapia individual, sino con un enfoque de terapia familiar. Y nosotros, como terapeutas, hacíamos algo. Fuimos entrenados para hacer algo, intervenir según nuestros conocimientos.

Así configurábamos también las familias. Pedíamos al cliente que eligiera y configurara representantes, luego interveníamos según nos parecía oportuno de acuerdo a nuestras formaciones anteriores y según lo que aprendimos de Ordenes del Amor y los vínculos dentro del Sistema Familiar, con el propósito de encontrar una solución. Primero mirábamos el problema y después buscábamos una solución. Ésto fue de mucha bendición.

CAMINANDO CON EL ALMA

Luego se manifestó que los representantes tenían una función más importante de lo que suponíamos en un principio. Se pudo observar que los representantes estaban en un contacto muy inmediato con un campo más amplio y pudieron desde allí traer a la luz algo, que iba más allá de lo que habíamos descubierto como Órdenes del Amor. Los representantes pudieron hacerlo, siguiendo un impulso que los ponía en movimiento. De pronto estábamos confrontados con situaciones nuevas y con movimientos nuevos. Estos movimientos muchas veces contradecían nuestros conceptos preconcebidos.

Algunos entonces sentían la necesidad de interrumpir tales movimientos, en vez de esperar y observar lo que se iba manifestando. Pasó cierto tiempo hasta que pude darme cuenta – estoy hablando de mí ahora – que si yo soporto la espera y me abro a lo que se muestra, llego a profundidades que superan de lejos cualquier psicoterapia. Estoy de pronto en contacto con fuerzas del destino ante los cuales me siento impotente.
De pronto vemos, por ejemplo, que alguien es atraído fuertemente hacia la muerte. ¿Qué hacemos entonces? Ó alguien se siente culpable de la muerte de otro. ¿Con qué método aprendido de la psicoterapia podemos intervenir aquí? ¿Ó estamos llegando a un límite en nuestros intentos de ayuda donde el “no hacer”, el ”soltar” se hace imperante?. Donde, recién cuando dejamos de actuar, comienza la auténtica ayuda.

Una nueva fuerza toma la conducción. Yo me entrego a esa fuerza, y de repente me doy cuenta si tengo que intervenir, hacer algo y qué es lo que tengo que hacer. Aún cuando en un principio parece absurdo. Pero yo voy con el movimiento, y entonces se muestra, se despliega algo, que de ninguna manera se podía prever.
Bueno, esto va más allá de la Terapia Familiar y más allá de toda terapia. Lo que comenzó con las Constelaciones Familiares se transforma en un Caminar con el Alma. ¿Cuál alma? No con la propia, no con la del cliente, ni con la del representante, sino con el alma que actúa en todos al mismo tiempo.

Cuando llegamos a una sintonía con aquella alma, sentimos paz. Nos hemos detenido frente a lo inconmensurable y este “inconmensurable” se nos acerca en el resultado.

miércoles, 27 de enero de 2010

"Si tienes a tu madre bien integrada en ti, ¡brillarás!"

Bert Hellinger, creador de las Constelaciones Familiares

"Si tienes a tu madre bien integrada en ti, ¡brillarás!"


VÍCTOR-M. AMELA - 15/10/2009

Tengo 83 años. Nací en Alemania, y allí vivo. Viajo por todo el mundo para dirigir talleres de constelaciones familiares. Estoy casado. No tengo hijos. No hablo de mis ideas políticas ni de mis creencias: ¿en qué podría serle útil eso a alguien? La madre es la conexión a la vida

¿Qué recuerda de su madre?

¿Puede informarme antes sobre qué asuntos le interesa tratar en esta entrevista?

De su psicoterapia. Pero, antes, un poco de su vida.

¿Mi vida? Mejor hablar de asuntos útiles para sus lectores, más que de circunstancias de mi biografía.

De acuerdo, pero creo que conocer su vida puede ayudar a entender su método. ...

¿Qué recuerda de su juventud bajo el nazismo? ...

El catolicismo de sus padres les blindó de aquella barbarie, he leído.

Proponga un tema, y centrémonos en eso.

De acuerdo: la madre. Sostiene que la figura materna moldea nuestra psique.

¡La madre está en el fundamento de nuestra felicidad! Si estás en buena conexión con tu madre, brillas.

¿Brillas?

Si uno tiene bien integrada psíquicamente a su madre, irradiará alegría, la gente le amará, triunfará en su vida, brillará...

Pues por eso le pregunto por su madre.

Si amamos a nuestros padres tal como son, si decimos "sí" a lo que son y, sobre todo, si estamos contentos de que nos pariera nuestra madre, ¡brillaremos de felicidad!

Fue usted sacerdote católico, misionero entre los zulúes durante 16 años... ...

¿Qué aprendió allí?

Jamás vi un niño zulú irrespetuoso con sus padres, con sus mayores, sus antepasados... ¡Sería inconcebible para un zulú hablar mal de sus padres!

Dejó usted el sacerdocio católico al hacerle alguien cierta pregunta... ...

"¿Qué es más importante para ti: tus ideales o las personas?", le preguntaron. ...

Recapacitó y regresó a Europa hace 30 años para formarse en psicoterapia.

No hablo de mí: no es tema. Pregúnteme algo que sea útil a los que lean esto, por favor.

Ideó un método psicoterapéutico: las constelaciones familiares. ¿Qué es eso?

¿Está dispuesto a escuchar cosas que puedan parecer algo extrañas?

No será la primera vez, no tema.

Cuando alguien tiene un bloqueo, un conflicto, un nudo, y quiere abordarlo para resolverlo, yo lo coloco en el escenario del taller de psicoterapia, o bien coloco a alguno de los presentes para que le represente...

¿Aunque no se conozcan entre ellos?

Aunque no se conozcan, ni aunque el representante sepa nada del representado.

¿Y qué sucede entonces?

Que el representante hace algo, mira a algún lado, se mueve... Si mira al suelo, está mirando a alguien muerto, quiere morir... Coloco ahí a otra persona que represente al muerto. Los movimientos se suceden y van expresando el conflicto...

¿Qué mecanismo está operando ahí?

No busque explicación científica. Lo cierto es que ahí se manifiestan las fuerzas que nos traspasan. A cada representante le invaden las emociones de los representados, el conflicto se manifiesta en esos movimientos impredecibles.

¿Y qué papel desempeña usted?

Ninguno. Sólo siento y observo lo que sucede. La figura de la madre es representada siempre en algún momento. No necesito preguntar, sólo veo qué pasa. En el caso de personas con fracasos en su vida personal y profesional, siempre es lo mismo: ¡desconexión con la madre!

¿Sí? ¿Y puede eso repararse?

Puede. A menudo se reencuentra con la madre, se abrazan, respiran hondo... ¡Se han reconectado! Esos movimientos han unido lo que estaba separado.

¿Nuestros fracasos e infelicidad vienen de escisiones con la madre, pues?

Sí. Muchos empresarios fracasan porque reproducen con su empresa la misma relación de rechazo que mantienen con mamá.

¿Y qué pinta el padre en todo esto?

La madre nos conecta a la vida y el padre nos conduce a la vida social.

¿Qué pasa con el recién nacido cuyos padres se separan?

Si los padres acuerdan seguir desempeñando sus respectivas funciones de padre y madre, nada grave.

¿Y si la madre menoscaba la figura del padre ante el hijo?

Si una madre menoscaba o hurta la figura del padre, incapacita a sus hijos para el éxito social y siembra en sus hijos una rabia... que un día ellos le devolverán.

¿Por qué existe hoy tanto niño tirano?

He visto a un niño de dos años agresivo: ha absorbido la rabia que su madre no asumió por un aborto... A veces el niño capta que papá o mamá no quiere vivir, y es agresivo para atraer su atención hacia la vida.

¿Por qué tantas mujeres asesinadas?

Víctimas de los hombres por centurias, las mujeres hoy miran a los hombres con rabia acumulada... y algunos hombres reaccionan criminalmente a esa mirada.

Aconseje a una chica a punto de parir.

¿Quieres parir de verdad? ¿O sólo que te extraigan al bebé sin enterarte?: anestesia y cesárea hurtan al niño su primera oportunidad de luchar y su gran ocasión de obtener una victoria en esta vida. ¿Podrá una criatura con este comienzo imponerse luego en la vida y triunfar? Difícil, difícil...
"Si tienes a tu madre bien integrada en ti, ¡brillarás!"

Ex misionero

Estudió filosofía, teología, pedagogía, fue misionero católico y hoy es uno de los psicoterapeutas más controvertidos, padre de las constelaciones familiares, pujante sistema de aproximación y resolución de conflictos psíquicos. Ver uno de sus talleres (convocados aquí por el Institut Gestalt) asombra: misteriosamente se generan movimientos entre personas que no se conocen y que representan a otras. "¡Desconocemos las fuerzas que nos albergan!", resume Hellinger. Rastreo su biografía en internet en busca de claves, pero él se niega a personalizar. Le pregunto qué es la felicidad: "Es el éxito cuando sirves a la vida. El nacimiento de un bebé. O esta entrevista, si la escribe usted bien".

lunes, 4 de enero de 2010

Entrevista - Santiago del Estero - Octubre de 2009

Entrevista realizada en el programa "A tu salud", Santiago del Estero - Octubre de 2009

http://www.youtube.com/watch?v=0gsy3hLByZg

jueves, 18 de junio de 2009

No hay nada mejor que aquello que es. No hay mejores padres que aquellos que tenemos, no hay mejor futuro que aquél que tenemos por delante. Lo que es, es lo más grande. Y felicidad significa llevarlo en mi corazón tal y como es, y alegrarme por ello. Esta es la plenitud de la felicidad: alegrarse de la realidad tal y como es; de nuestros padres, tal y como son; de nuestro pasado, tal y como fue; de nuestras parejas, tal y como son; de nuestros hijos, tal y como son; justamente así. Éso es lo más bello. La alegría es la plenitud de la felicidad.

Bert Hellinger.

martes, 5 de mayo de 2009

El paraíso

...y Dios miró todo lo que había hecho, y le pareció que todo estaba muy bien, hasta que de repente Adán y Eva comieron del árbol del conocimiento.

¿Cuál fue el conocimiento?

La diferencia entre bien y mal. Y con éso el paraíso se terminó y comenzó el arduo trabajo, es decir: la diferencia entre bien y mal separa de Dios.

¿Cómo regresamos a la unidad con lo Divino?

Cuando dejamos atrás la diferenciación entre bien y mal. Ahí comienza el paraíso en nuestra alma. Luego con aquellos que están cerca nuestro, luego éso se va ampliando a través del mundo.

Bert Hellinger en Buenos Aires - Agosto de 2007

miércoles, 8 de abril de 2009

Constelaciones Familiares


"Detrás de todo comportamiento, por muy extraño
que parezca, actúa el amor"


El método de las Constelaciones Familiares permite a todos y cada uno de los miembros de la familia recuperar su lugar y liberarse de aquello que no le es propio, devolviéndoles sentimientos, responsabilidades y consecuencias a quienes corresponda. De esta manera el sistema se ordena, y se repara aquello que causaba dolor, permitiendo a cada cual recuperar su lugar en el sistema, y seguir su propio destino. Encontrar ese orden es el objetivo de las Constelaciones Familiares.

sábado, 4 de abril de 2009

Introducción

Cuando los problemas parecen no tener solución, la historia familiar puede tener la respuesta. Como miembros de una familia, estamos involucrados en sus hechos y circunstancias, aún cuando correspondan a generaciones anteriores. Constelaciones Familiares: un método para devolver a cada uno su lugar, libre de responsabilidades y consecuencias que no le corresponden. Listo para hacer su propio destino.

miércoles, 1 de abril de 2009

¿A qué está dirigido el trabajo?

El trabajo está dirigido a:

-Personas:
problemas vinculares en general, problemas de pareja, con la familia, necesidad de encontrar el lugar en la familia, no poder armar pareja, enfermedades físicas y mentales, tomar decisiones (operaciones, trasplantes, mudanzas, laborales, empresariales, adopciones, vocacionales, etc.), fracaso económico, no poder ejercer la profesión, tendencias autodestructivas, adicciones, depresión, anorexia, bulimia, falta de energía para la acción, no poder terminar las cosas que se inician, haber sido víctima de violencia, abuso sexual, problemas de conducta y dificultades en el aprendizaje en chicos, accidentes reiterados, familias ensambladas, juicios que no avanzan, propiedades que no se venden,

-Empresas y comercios con cualquier tipo de dificultad: operativas, económicas, conflictos entre el personal, ó entre los dueños si es familiar.

-Todo tipo de institución: escuelas, con alumnos con
problemas ó institucionales (entre maestros, maestros
con la institución, etc.); hospitales, fundaciones,
organismos oficiales, fundaciones, institutos de
enseñanza, etc.

-Organismos oficiales ó instituciones privadas para: violencia familiar, adopciones, abuso sexual, ayuda al suicida, bulimia, anorexia, adicciones, HIV, madres solteras, etc.

Supervisión para terapeutas en general y médicos.

Parejas.
Parejas embarazadas, para que el bebé nazca en un
sistema ordenado, y con su lugar definido.

Abogados de familia, y en general.

Y cualquier situación que involucre a personas y organizaciones.

domingo, 8 de marzo de 2009

¿Cómo funcionan?

El desarrollo de las Constelaciones Familiares produjo un impacto profundo en el trabajo relacionado con la situación de las personas en su entorno familiar.
El creador de este método, Bert Hellinger, descubrió que los sistemas familiares, como todo en la naturaleza, están regulados por cierto orden. Cuando este orden es transgredido, el sistema completo se resiente, y los miembros de generaciones posteriores van quedando implicados en sucesos ocurridos en su familia de origen ó generaciones anteriores bajo ese desorden.
Así, encontramos que, por ejemplo, si un miembro de la familia:

  • Es excluido, ó
  • Toma los sentimientos no expresados por alguien, ó
  • Toma las responsabilidades no asumidas por otro, ó
  • Es puesto por la dinámica familiar en un lugar que no es el suyo, ó
  • Se identifica con alguien que sufrió un destino trágico,
  • Etc.
se producen conflictos, enfermedades, y dificultades de todo tipo.
De manera que, cuando el orden que encauza el amor no es respetado, el amor se traba ó es mal dirigido.
Necesariamente el orden debe ser respetado para evitar las consecuencias negativas mencionadas.
Lo circular en los sistemas muestra cómo hay una implicación de algunos miembros en hechos protagonizados por otros, que estaban desde antes en el sistema.
La Constelación Familiar es un método de trabajo creado por Bert Hellinger para restablecer el orden y reparar el daño producido, reubicando a cada uno en su lugar, devolviendo a cada cual su responsabilidad, y liberando a aquellos que se hacían cargo de una suerte que no les correspondía.
El gran mérito de Bert Hellinger es haber logrado el modo de restituir al orden aquello que cayó en desorden, lo cual permite a las personas despegarse y despojarse de la carga que el sistema familiar, en búsqueda de su equilibrio, les impuso.
Cuando cada persona está en su lugar, y cada uno toma su responsabilidad y su destino, el sistema entra en un estado de armonía, el amor fluye, todos se reconectan con la fuerza de la vida que llega de y a través de sus padres y antepasados, y finalmente esto permite que cada cual esté libre para hacer su propio destino.
Entonces, el orden sanador restablece la armonía en el sistema, donde todos se ven beneficiados al recuperar la conexión con la familia. La fuerza que se obtiene de esta manera no existe en otra parte: la familia tanto enferma como sana, y cuando esa fuerza circula armoniosamente, los resultados son maravillosos.
Los miembros de un sistema siempre responden, por profundos lazos de amor y lealtad, a lo que el sistema espera de ellos, y están dispuestos a cualquier sacrificio por cumplir con esa expectativa.
Cuando el sistema es restituido al orden, al sentirse liberados, sus integrantes se reencuentran, se miran, sus rostros se iluminan, y una sensación de alivio, alegría y bienestar los invade y les dice que ahora es posible pertenecer, y al mismo tiempo ser dueños de su propio destino.

miércoles, 4 de febrero de 2009

¿Cuál es su dinámica?

Muchos comportamientos y sentimientos no se explican por la actual situación vital de una persona, sino que se remontan a determinados sucesos en su familia de origen, ó más atrás.

El amor en la familia tanto enferma como sana. No es la familia la fuente de enfermedades, sino la profundidad del vínculo y la necesidad de compensación en el seno de la familia, que pueden conducir a enfermedades.

Una red familiar es más que la familia: a ella pertenecen los hermanos, los padres y sus hermanos, los abuelos de ambas partes, los bisabuelos é incluso antepasados más lejanos si tuvieron una suerte especial, todos aquellos que hicieron sitio para otros en el sistema, y aquellos cuyo sufrimiento ó sacrificio benefició a algún miembro.
En esta comunidad unida por el destino, todos se hallan atados a todos.

Descubriendo esta dinámica, el mismo amor y la misma necesidad de vinculación también permiten influir sobre las enfermedades a un nivel superior.

Sólo reconociendo el vínculo con la familia, viendo y distribuyendo claramente las responsabilidades, el individuo se siente aliviado y capaz de cumplir lo que es su propio destino especial, sin que lo anterior sea una carga para él, ni lo persiga.

Son fuentes de trastornos y enfermedades los movimientos interrumpidos hacia la madre ó el padre; exclusión de miembros; muertes tempranas; abortos provocados; migraciones por guerra ó pobreza dejando familiares, ó no; obtención de algún beneficio causando sufrimiento a otras personas; divorcios; separaciones de hermanos; adopciones; secretos familiares; suicidios; asesinatos; muerte de la madre en el parto; muerte de alguno de los padres cuando los hijos son chicos; adicciones de los padres; violaciones; ocupar roles que no corresponde; incesto, etc.

La familia y la red familiar tienen un alma y una conciencia comunes que vinculan y dirigen a sus miembros de acuerdo con un orden inconciente.

El alma vela por la integridad de la red familiar. Por ejemplo: compensa la exclusión de un miembro a través de otro miembro de una generación posterior, que lo representa.

Muchos problemas se desarrollan porque las personas piensan que a través del razonamiento, del esfuerzo ó del amor podrían superar el orden.
El orden, sin embargo, nos viene dado y no es posible sustituirlo por el amor. Sería ilusorio. Hay que volver al orden, al punto de la verdad: sólo ahí encontramos la solución. El amor es una parte del orden. El orden precede al amor, y el amor únicamente puede desarrollarse en el marco del orden.

El orden acertado tiene un efecto sanador ó liberador en un sistema.
Un orden es algo predeterminado. Por ejemplo: un árbol se desarrolla siguiendo un orden determinado, predeterminado para él. No puede salir de ese orden, si lo hiciera ya no sería un árbol.
De la misma manera, la persona humana se desarrolla según un orden determinado. Estos órdenes nos vienen dados de antemano.
El orden se muestra en aquello que une y permite un desarrollo. Si al configurar una familia, todos se sienten mal, se supone que se encuentra en desorden. Así, se busca el orden sanador, el orden que libera. Una vez encontrado, se ve que ese orden une a todos, y al mismo tiempo permite el desarrollo posterior de cada uno.
A través de la observación, y por sus efectos, Bert Hellinger pudo aclarar los órdenes que determinan la interacción entre los miembros de un sistema familiar.

-El derecho a la pertenencia: cada miembro de una familia tiene el mismo derecho a la pertenencia, independientemente de si aún vive ó ya está muerto. Quien forma parte, tiene derecho a pertenecer.
Siempre que uno de sus miembros es excluido, el alma familiar reacciona como si se tratara de una injusticia grave que reclama la expiación, es decir sanar la herida causada en el sistema familiar, por dicha exclusión, a través de algún sacrificio. Por ejemplo, una persona puede ser considerada indigna de pertenecer a la familia por una adicción, ó por ser homosexual; ó un hijo que murió al nacer puede ser olvidado.
La expiación lleva a que otro miembro del sistema, represente a la persona excluida ú olvidada, tomando como suyos, sus sentimientos y su suerte.
Esta es la causa más importante de implicaciones sistémicas y de los problemas resultantes tanto para el implicado como para su familia.

-El orden de origen: existe una jerarquía en función del comienzo de la pertenencia a un sistema. El que estuvo primero en un sistema tiene prioridad sobre aquel que vino después. El primer hijo tiene prioridad sobre el segundo, y la relación de pareja sobre la paternidad.
También entre los sistemas hay una jerarquía, pero a la inversa: el nuevo sistema tiene prioridad sobre el anterior. Por ejemplo, la familia actual tiene prioridad sobre la de origen.
Todos los procesos trágicos en una familia se deben a que alguien posterior atenta contra el orden de origen. Es decir, se arroga un derecho de alguien anterior.
Sería el caso de un hijo que intenta expiar una culpa en lugar de sus padres, ó de llevar las consecuencias de una culpa de los padres. El hijo no se da cuenta de esta arrogación, ya que actúa por amor. No oye ninguna voz en su conciencia que le advierta del peligro. Pero la convicción de estar haciendo algo bueno y grande, es decir, la buena conciencia, no lo protege, ya que no varía el resultado ni las consecuencias.
Por tanto, en constelaciones familiares el interés se centra sobre todo en descubrir dónde la persona se arroga un derecho que no le corresponde.

-El derecho al propio destino: hay que respetar el destino de cada persona.
Estamos al servicio de algo más grande. Cada persona tiende a una meta. Por otra parte, se encuentra limitada por las circunstancias, por la enfermedad, por su constitución física, por su país, etc. Cada uno se desarrolla en el marco de lo que le viene dado. Cuando asiente a estos límites, de ahí gana fuerzas para una vida plena.
El destino también exige el asentimiento a las consecuencias del actuar y de las culpas personales. Aquí el terapeuta, igual que el paciente debe asentir a ese destino concreto. Justamente porque asiente, dentro de los límites establecidos también puede encontrar caminos que ayuden a las personas.
El derecho al propio destino también implica que nadie debe arrogarse el derecho a tomar para sí el destino de otras personas.
Detrás de todo comportamiento, por muy extraño que parezca, actúa el amor. Y también detrás de los síntomas que una persona presenta siempre actúa el amor.
Entonces, lo decisivo en terapia es encontrar el punto donde este amor se concentra. Esta es la raíz, y desde allí siempre se encuentra el camino a la solución, ya que también la solución siempre pasa por el amor.

-El equilibrio entre dar y tomar: en lo hondo del alma existe la necesidad de equilibrio. Quien recibe algo siente la necesidad de compensarlo, dando también él. Este impulso permite el intercambio y la cohesión.
Por ejemplo: un hombre y una mujer se aman. Cada uno proviene de una familia en la que se permite tomar más ó menos. Únicamente se puede dar tanto como el otro pueda y quiera devolver. Si uno da más de lo que el otro tolera, la relación peligra. El dar en una relación siempre está limitado. El que da más se encuentra por encima del otro; el que recibe más, finalmente se enoja porque no puede devolver en la misma medida. Donde no es posible compensar el desequilibrio en una relación, no puede darse una unión duradera.


CONCLUSIÓN:
- La finalidad de la terapia es devolver al orden algo que cayó en desorden. La efectividad resulta de un orden encontrado.
- La meta de la constelación consiste en hacer que una persona recobre la unión con su familia, de manera que pueda estar en contacto con todas las fuerzas buenas que ésta alberga. Este hecho le da muchas energías nuevas al individuo y siempre es un éxito.

Los problemas cotidianos no tienen ninguna importancia, este enfoque se centra en el sistema familiar en conjunto.
Con una adecuada actitud de profundo recogimiento, el coordinador entra en contacto con algo sanador que no puede ser explicado, pero se muestra por sus efectos.
Existe una especie de percepción íntegra, que se hace posible cuando se le da un lugar a todo, sin excluir nada. En una constelación familiar hay que darle un lugar en el corazón a cada uno, también a aquellos que parecen los malos, ó aquellos que a otros les producen miedo ó repugnancia. Así, el coordinador está en contacto con la totalidad. Además, ve a cada persona como parte de un todo mayor, y en el trabajo con ella en el fondo no se dirige a esa persona como persona, ó a su yo, sino que habla a su alma, allí donde se encuentra unida con algo más grande.

Con el paciente se miran todas las consecuencias de su comportamiento y las consecuencias de los destinos de su familia. No sólo lo fácil, también lo difícil. Y se lo acompaña hasta el límite, donde él y su sistema se hallan amenazados. Así se abarca toda la realidad de este sistema, y se sabe dónde se encuentran los límites, y qué es posible ó imposible dentro de este campo.
Cuando el paciente conoce los límites, se le abre la posibilidad de establecer cambios. Sólo así percibe lo que es posible, tanto para mal como para bien, y eso le da fuerza. Con esa fuerza se busca la solución que sea posible, la mejor para todos.

La constelación se hace en grupo. El paciente resume en dos ó tres frases el motivo de su consulta y comenta algunos hechos graves de su familia de origen, ó de las familias de sus padres. Según el caso, el coordinador decide con cuáles miembros de su familia hay que trabajar, y el paciente elige personas del público para que los representen. Esta elección debe ser guiada por la intuición, no se busca parecido físico, similitud de edad, ni ningún otro rasgo objetivo.
El paciente, siempre guiado por su intuición, los ubica en el espacio relacionados entre sí, sin indicarles posturas, gestos, ni discurso. Así reproduce su imagen interna de la familia. Los representantes se centran y toman los sentimientos, pensamientos y hasta los síntomas físicos de las personas a las que representan.
En base a la configuración original, lo que ellos comentan, y a sus posturas y actitudes, el coordinador comprende la dinámica que llevó al paciente a su situación actual. Mediante frases reparadoras y llevando a los representantes al lugar que les corresponde según los órdenes del amor, los guía hacia la solución. Una vez ordenado y reparado el sistema, queda configurada una nueva imagen que el paciente incorpora y así se inicia el proceso de sanación.


Este método es creación de Bert Hellinger, quien descubrió los órdenes del amor en su trabajo con terapia sistémica. Fue introducido y difundido en Argentina por Tíiu Bolzmann.

lunes, 2 de febrero de 2009

Constelaciones Organizacionales: Una opción para su empresa u organización.

Las Constelaciones Familiares demostraron ser una herramienta sumamente eficaz para la resolución de problemas familiares y personales.
De la misma manera, las Constelaciones Organizacionales pueden convertirse en un instrumento invalorable para la toma de decisiones y solución de dificultades operativas y de relaciones personales entre miembros de una organización, por ejemplo, empresas, hospitales, escuelas, fundaciones, etc.
Cuando no se puede evaluar objetivamente, como por ejemplo, en el caso de tener que tomar empleados, agregar productos, decidir la incorporación de un nuevo socio, y muchas otras situaciones en que sólo se puede especular acerca de lo que podría suceder en el caso de realizar un cambio, ó analizar desde lo visible la causa de una dificultad, este método ofrece una opción novedosa y casi inexplorada hasta ahora: basado en los mismos principios que las Constelaciones Familiares, permite dilucidar de qué modo los problemas están causados porque no se respetan los órdenes básicos que toda organización humana debe respetar para estar en equilibrio y armonía, y así poder desarrollarse plenamente.
Cuando una empresa no vende todo lo que debería, ó pierde dinero a pesar de que las ventas son buenas, cuando los cambios efectuados no rinden los frutos esperados, cuando una institución no logra organizarse y ser eficiente a la hora de brindar su servicio, y muchos etcéteras más, la Constelación Organizacional puede mostrar la trama oculta que está trabando el normal desenvolvimiento de las actividades y la consecución de los resultados esperados.

martes, 20 de enero de 2009

Próximos Talleres


Neuquén - Capital

Diciembre

Sábado 14
     14 a 20 horas: charla informativa y Taller

Domingo 15
9 a 15 horas: 1515115515 a 20 horas1TallerTTaller


Entrevistas individuales: horario a combinar

Informes é inscripción: Sandra Tappa
0299-15-6348733

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Merlo - Buenos Aires
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Primer Domingo de cada mes: Constelaciones Familiares y Organizacionales

Primer Domingo de cada mes

4 a 15 hs.: Charla informativa y consultas personales:
9 a 15 hs.: Charla informativa y Taller

Informes é inscripción: Vanina Gallo
011-15-6822-5010

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San Martín de los Andes - Neuquén

Fecha a confirmar


     14 a 20 horascharla informativa y Taller


9 a 15 horas: 1515115515 a 20 horas1TallerTTaller

Entrevistas individuales: horario a combinar

Informes é inscripción: Sandra Tappa
0299-15-6348733
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CABA

Charla informativa y taller:

Primer Sábado de cada mes
9 a 15 horas

Informes é inscripción: Marcelo Holtzman

011-4863-3029
011-15-5114-6484
-

Bariloche - Río Negro

Fecha a confirmar

Charla informativa y Taller:

Informes é inscripción: Andrea Pena
0294-15-4609119
0294-4425119

-

Mar del Plata

 Fecha a confirmar

Sábado 28
14:30 a 20:30 horas: Charla informativa abierta y gratuita y Taller

Domingo 29
15:30 a 20:30 hs.: Taller
14 a 20 hs.:

Entrevistas individuales: horario a combinar

Informes é inscripción: Sandra Marcin

0223-4710403
0223-15-5905170
-

Trelew - Chubut

Marzo

                                               Sábado 8,  14 a 20 hs.: Taller                                          
               Domingo 9, 9:30 a 15:30 hs.: Taller
                                                   

Entrevistas individuales: horario a combinar

Informes é inscripción: Ercilia Navarro
(0280) 4428196
(0280) 15-4407839

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Punta Alta - Buenos Aires

Fecha a confirmar

Sábado 26, 14:00 a 20 hs.: Charla informativa abierta y gratuita

Domingo 27, 9 a 15 hs.: Taller


Entrevistas individuales: horario a combinar

Informes é Inscripción: Mirta Caffe
Teléfonos: 02916461528
02932421892
mircaf@yahoo.com.ar

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Azul - Buenos Aires

Fecha a confirmar

Sábado , 14:30 a 20 hs.: Charla informativa abierta y gratuita

Domingo , 14:30 a 20 hs.: Taller


Entrevistas individuales: horario a combinar

Informes é Inscripción: Susana Longstaff
Teléfonos: 02281-15-49-2656
02281-42-2936

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Los órdenes del amor regulan todo sistema humano, permitiendo a cada integrante ocupar su lugar y vivir su propio destino.
La familia, nuestro sistema de pertenencia primordial, transporta en sí misma la fuerza que nutre a cada integrante, proveyéndolo de los recursos para vivir plenamente.
Los órdenes del amor fueron descubiertos por Bert Hellinger, cuando trabajaba con familias según la terapia sistémica. Su intuición y su percepción le permitieron encontrar estos mecanismos que regulan el funcionamiento de la familia y otras organizaciones humanas.
Los órdenes del amor son pautas "naturales" de respeto y lealtad indispensables para que el amor, como fuerza vital, circule con total intensidad en el sistema.
Así, encontramos que el amor se traba ó es mal dirigido, si un miembro de la familia, por ejemplo:
1. Es excluido, ó
2. Toma los sentimientos no expresados por alguien, ó
3. Toma las responsabilidades no asumidas por otro, ó
4. Es puesto por la dinámica familiar en un lugar que no es el suyo, ó
5. Se identifica con alguien que sufrió un destino trágico


La Constelación Familiar es un método de trabajo fenomenológico para restablecer el orden y reparar el daño producido, reubicando a cada uno en su lugar, devolviendo a cada cual su responsabilidad, y liberando a aquellos que se hacían cargo de una suerte que no les correspondía.
Cuando cada persona se encuentra en su lugar, asume su responsabilidad y su destino, el sistema entra en un estado de armonía, el amor fluye, todos se reconectan con la fuerza de la vida que llega de y a través de sus padres y antepasados.
Entonces, el orden sanador restablece la armonía en el sistema, donde todos se ven beneficiados al recuperar la conexión con la familia. La familia tiene un alma y una conciencia que velan por la integridad de la red familiar, vinculando y dirigiendo a sus miembros de acuerdo con un orden inconsciente.
El orden es lo esencial y en él encontramos la solución.
Las constelaciones lo muestran